
Por un año lleno de éxitos!.
Un calendario no hace magia, todo depende de nosotros.
Brindo por y con ustedes.
Tema de viernes: stereo love • edward maya & vika jigulina

Seamos felices...
            "En la esquina de la calle principal,
         intentando mantener la linea.
         Dices que quieres que nuestra relación avance,  y
         que yo estoy retrocediendo.
            ¿Puedes leer mi mente?
         ¿Puedes leer mi mente?
            Realmente nunca renuncié
             a evadirme de ésta ciudad de dos estrellas.
             Tengo la luz verde.
             Tengo una pequeña lucha interna.
             Voy a darle la vuelta a ésto.
            ¿Puedes leer mi mente?
         ¿Puedes leer mi mente?
            Los viejos y buenos tiempos. El hombre honesto.
             El corazón inquieto. La Tierra Prometida.
             Un beso sutil que nadie percibe.
             Una muñeca rota, y un gran trapecio.
            Oh, bueno, a mi no me importa si a ti no te importa.
         Porque no brillo si tú no brillas.
         Antes de que te vayas, ¿puedes leer mi mente?
            Es divertido como te vienes abajo.
         Esperando un gesto.
         Me detengo en el camino de entrada
         con un mágico escalofrío recorriendo mi espalda.
            ¿Puedes leer mi mente?
         ¿Puedes leer mi mente?
            La reina adolescente, el arma cargada.
         el ansiado sueño, el elegido.
         El acento sureño, el mundo oculto.
         Un muro de una ciudad y un trampolín para saltar.
            Oh, bueno, a mi no me importa si a ti no te importa.
             Porque no brillo si tú no brillas.
             Antes de que saltes,
             dime qué es lo que ves
             cuando lees mi mente.
            Deslizándote por mi fe antes de que caiga.
         Nunca devolvió aquella llamada.
         Mujer, abre la puerta, no dejes que pique.
         Quiero respirar ese fuego otra vez.
            Dijo que no le importaba. No te importa.
         Porque no brillo si tu no brillas.
         Pon tu espalda sobre mí.
         Pon tu espalda sobre mí.
         Pon tu espalda sobre mí.
            Las estrellas arden como diamantes rebeldes
         cortados el sol.
         ¿Puedes leer mi mente?"

Nos damos cuenta que todo el universo conspira a nuestro favor en el momento que decidimos llamar a esa persona que no debemos contactar pasando por la situación de no ser atendidos, no ser correspondidos a la llamada perdida y ya al segundo día con toda la angustia y frustración convertida en ira, hacemos memoria y nos damos cuenta que marcamos el número equivocado.
Y llegaron los 27. Con ellos la sensación de sentirme mas cerca de los 30 aunque esté casi al lado de los 25. Saber que estoy grande, pero sentir todavía que soy chica.
Suelo "descubrir" que el supuesto mecanismo que me habían marcado como incorrecto no era estrictamente así, cuando olvido la "orden" de no intentarlo y procedo a hacerlo encontrando no solo el motivo de la falla, sino la manera indicada para que funcione.
Lo sabemos todos.
Lejos de ser Roberto Carlos, debo reconocer que soy demasiado afortunada. La vida me llenó de amigos. Están los que ante una cagada primero me dan el correctivo y después el abrazo, los que te regalan bolsitas de la alegría (noo, solo golosinas contiene) para los viajes largos tanto físicos como emocionales, los que te llevan de fiesta, lo que te escuchan sin chistar, los que nunca están de acuerdo con tus decisiones, lo que reclaman, los que agradecen tenerte como "ángel guardián", los que te llaman solamente para decirte "gracias por estar", los que te hacen la segunda en todas, los de hace mucho, los de hace poco.